· Actualizar los estudios sobre los efectos esperados del cambio climático sobre la flora, la fauna y el patrimonio geológico de España, así como sobre la estructura y funcionamiento de los ecosistemas terrestres y marinos de los que forman parte.
· Apoyar las políticas y medidas orientadas a disminuir los niveles de tensiones sobre las especies y ecosistemas, a fin de facilitar que éstas puedan adaptarse, manteniendo su biodiversidad y resiliencia ante el cambio climático.
· Impulsar la introducción de criterios de adaptación al cambio climático en la planificación y gestión de las áreas protegidas.
· Promover medidas de adaptación al cambio climático que aprovechen el potencial de las soluciones basadas en la naturaleza como medio para fortalecer la resiliencia de especies y ecosistemas.
· Prevenir y hacer frente a los riesgos asociados a la proliferación de especies invasoras como consecuencia del cambio climático.